Dentro de las patologías caninas, la alergia es una de las más comunes. Los perros pueden sufrir desde leves irritaciones en la piel, hasta ruidos respiratorios fuera de lo normal.

Podemos saber fácilmente cuando nuestros fieles compañeros están sufriendo una reacción alérgica. No solo por lo molestos que se ponen durante este tiempo, sino también porque la mayoría de los síntomas son fáciles de detectar y, algunos, hasta son parecidos a los que padecemos nosotros.

Primero hay que entender qué significa y cómo se origina.

¿Qué es la alergia en los perros?

Es una enfermedad inflamatoria de la piel. Se da un proceso inmunomediado mediante el cual el sistema inmune reacciona ante ciertas sustancias provocando inflamación. Estas sustancias se conocen como alérgenos.

En este sentido, el factor genético juega un rol importante en la predisposición de nuestras mascotas a sufrir alergias. Por ejemplo, razas como el bulldog francés o el shar pei.

Tipos de alergia

1.     Alimentarias: se manifiestan cuando los ingredientes de la comida causan una reacción inflamatoria. La carne de pollo y vaca, leche de vaca y sus derivados, huevos, cereales aditivos y conservantes pueden funcionar muchas veces como alérgenos.

2. Alergias a las pulgas: esta es una reacción a la saliva de estos insectos. Los síntomas varían desde una picazón leve, a una reacción grave como cuando se muerden.

3. Alergias ambientales: Los principales causantes son los ácaros, el polen, el polvo y el moho.

Síntomas

Si sospechas que tu perro tiene alergia porque no para de rascarse, estás en lo cierto. La comezón es uno de los síntomas más frecuentes en todas las alergias y se denomina purito. Pueden aparecer sarpullidos y heridas en la piel.

También puede provocar otras de las lesiones características que es el eritema, es decir, el enrojecimiento de la piel.

El  constante lamido puede llevar a otro de los síntomas más comunes que es la infección, clínicamente llamadas piodermias secundarias. Estas son heridas inflamadas y colonizadas por bacterias que aumentan aún más el malestar y el cambio de comportamiento de nuestras mascotas.

Otras manifestaciones clínicas se dan:

1. En los odios como otitis eritematosa

2. En los ojos como conjuntivitis

3. En el espacio interdigital como podo dermatitis y cambio de color en los pelos de las patitas.

4. En las vías respiratorias como estornudos inversos

5. Como micosis secundarias (hongos). Producen un olor rancio en la piel.

6. En las alergias alimentarias, además de la picazón y con mucho menos frecuencia, puede aparecer diarrea, vómitos y flatulencias.

¿Cómo se diagnostica?

A veces es muy difícil darnos cuenta qué tipo de alergia está afectando la salud de nuestros queridos compañeros. Los síntomas son similares en cada una de ellas y pueden manifestarse más de un tipo al mismo tiempo.

Pero hay algunos indicios que nos pueden dar una respuesta aproximada antes de consultar a un veterinario. Por ejemplo, en las alergias causadas por picaduras de pulgas, las partes más afectadas son la mitad posterior del cuerpo, la parte posterior de la espalda, la base de la cola, las patas traseras y el abdomen.

En las alergias a los alimentos los perros suelen rascarse la cabeza, las patas, los hombros, el abdomen, el área interna del muslo y las orejas. También, como dijimos, pueden aparecer síntomas gastrointestinales.

Es muy importante llegar al diagnóstico de la alergia primero. En base a las lesiones y localizaciones, y la respuesta posterior al tratamiento

¿Cómo es el tratamiento de alergias en perros?

Si tu perro presenta alguno de todos los síntomas de alergia, lo primero que tienes que hacer es llevarlo al veterinario. Este hará un diagnóstico teniendo en cuenta los síntomas, la historia del perro y el examen físico. Luego asignará un tratamiento correspondiente.

Entre los métodos más comunes para encontrar la causa se encuentran, el control de pulgas, los test intradérmicos y el cambio a una dieta hipoalergénica

Este último se basa en una dieta diseñada por el veterinario con la restricción de ciertos alimentos, que de a poco van siendo sumados hasta dar con la causa de la alergia.

La clave ante estas patologías es saber a qué es alérgico nuestro mejor amigo.

En resumen, estos son los principales tratamientos:

1.   Exponer lo menos posible al alérgeno

· Dieta hipoalergénica en la alergia alimentaria

· Control de pulgas en la dermatitis alérgica a la picadura de la pulga

2. Tratar el prurito (rascado) con corticoides

3.  Antibióticos y antimicóticos si hay infecciones secundarias

4.  Baños con shampoo medicados especiales para mascotas alérgicas

5.  Tratamiento hiposensibilizador, que requieren una previa identificación de los alérgenos mediante los test intradérmicos

El veterinario debe ser siempre la primera solución que buscamos. Él nos aconsejará cuál es la mejor forma de actuar. La alergia en perros es uno de los problemas más frecuentes, por eso es muy importante estar atentos a los síntomas que se vayan presentando para poder hacer el diagnóstico lo más rápido posible.