En el blog anterior te dimos los mejores tips para que puedas hacer un viaje seguro y exitoso con tu perro. Ahora, todo dueño de gato se preguntará ¿Y  qué pasa con ellos? ¿Cómo hago para llevarlos de vacaciones?


La realidad es que no nos olvidamos de nuestros queridos amigos felinos, ellos también merecen vacaciones, pero puede que sea un poco diferente a lo que tenías en mente.

El problema es que los gatos son animales muy territoriales, cualquier cambio que implique salir de su zona conocida y de confort puede resultarles muy estresante. Lo más peligroso es que, cuando esto sucede, suelen escaparse en busca de ese territorio que ellos llaman hogar.

Por eso, en general, se recomienda dejarlos en su territorio cuando te vayas de vacaciones. Esto evita cualquier posibilidad de escape en una zona totalmente desconocida para tu gatito. Lo mejor es buscar una persona de confianza que se encargue de cuidarlo mientras no estés, o por lo menos alguien que pueda cambiarle las piedritas, alimentarlo e hidratarlo.

De todos modos, puede pasar que no tengas a esa persona de confianza y tu única solución sea llevarlo ¡No te preocupes! Nosotros te damos algunas recomendaciones para que puedan disfrutar juntos de unas buenas vacaciones.

Los mejores tips para llevar gatos de vacaciones

Al igual que los perros, tenés que asegurarte que tu gato esté en perfectas condiciones de salud para viajar. Recuerda que en los destinos turísticos suelen haber muchas mascotas y esto puede llevar al contagio de distintas enfermedades

Entonces, previo al viaje, es indispensable hacer un control veterinario y asegurarte que tu gatito tenga el plan sanitario completo, es decir, vacunas, antiparasitario, control de pulga y garrapatas.

Todos los países tienen distintas reglamentaciones y requisitos para el transporte de mascotas. Si viajás dentro del país, tenés que averiguar en el colegio de veterinarios de tu provincia cuáles son los trámites y certificados que necesitás. En cambio para viajes internacionales, ya sea para perros o gatos, el SENASA tiene toda la información y requisitos que pide cada país.

Los aeropuertos y aerolíneas también tienen sus propias normas en cuanto a las mascotas. Lo más prudente es siempre preguntar a la aerolínea con la que vas a viajar. Ellos te darán la opción de llevarlos en cabina o en bodega, pero siempre dentro de una jaula transportadora con características determinadas. No olvides que nunca debes darle sedaciones a los animales en un avión, ya que puede provocar complicaciones en la salud.

Si viajás en auto vas a tener que estar atento a dos cosas importantísimas: los golpes de calor y los escapes. Los gatos y perros sufren el calor de manera distinta a la de los humanos, por eso nunca los dejes dentro del auto en ninguna parada, esto podría ocasionar el famoso y peligroso golpe de calor. Ahora en cada parada, es posible que tu gatito escape en búsqueda de su territorio, por eso no le saques los ojos de encima y tenelo siempre atado. No olvides también que lo ideal es colocar un cinturón de seguridad especial, para evitar que se mueva mucho durante el trayecto.

Nuestra última recomendación y clave para cualquier viaje, como en también en la vida diaria, es colocarle una chapita de identificación con el número de contacto por si se pierde. Esto te dará más posibilidades de encontrarlo en caso de que suceda.

Cuidadores de gatos en vacaciones ¿es una buena opción?

Hoy en día, existen muchas guarderías, residencias para gatos/perros o personas que se ofrecen a cuidar a nuestras mascotas mientras no estamos en casa. No hay dudas de que para los perros esto puede funcionar muy bien, pero para los gatos no tanto.

Si lo trasladas de su territorio, puede pasar que escape de la guardería o de la casa que lo aloja en búsqueda de ese lugar tan familiar para él. Entonces, dejarlo en manos del cuidador, puede ser tan problemático como llevarlo de viaje.

Por eso, lo mejor de todo es encontrar a una persona de confianza que pueda quedarse unos días en tu casa y cuidarlo. De todos modos, a veces es muy difícil encontrar a alguien con esa disponibilidad y la única opción que queda es dejar al gato solo en casa. En este caso, es fundamental que la persona que quede cargo haga visitas diarias para cambiarle su caja de arena, alimentarlo y en especial, jugar un rato con él para que no se sienta solo.


Ahora, si te preguntas si se puede llevar a un gato de vacaciones, las respuesta es sí, pero siempre siguiendo las recomendaciones que dimos arriba para poder disfrutarlas al máximo y evitar riesgos. Aún así, siempre es recomendable no trasladar mucho a nuestros pequeños felinos.